Por Fernando Cazón Vera
Toda voz poética ha de tener, a más del público oyente o lector, un destinatario. Que puede ser uno sólo, en trance de intimista, o lo colectivo si se trata de un mensaje de contenido social:
En el primer caso el autor entra en su propio o íntimo confesionario para decir su secreto a grandes voces. No precisamente para descargarse de culpa ni para desgarrarse las vestiduras, sino para entablar un diálogo, algo así como un monologo coloquial, perdonando la paradoja, con el ser que ha concitado el amor o el deseo, o esa propia identidad que va pretérita y presente rescatando del olvido.
Desde su primera obra, CONCUPISCENCIA, que tuve la satisfacción de presentar en su lanzamiento Siomara España nos llega ahora con su segunda entrega “ALIVIO DEMENTE”, el fruto de una pasión no escrita efímeramente sobre al agua o la liviana arena, sino con el firme propósito de llegar a lo perpetuo a través de las páginas impresas.
Y no se trata, digamos, de esas “segundas partes que nunca fueron buenas”, sino de una legítima tentativa de reinventarse con nuevos recursos en la riesgosa función de la escritura.
En realidad la poeta, que ha de cumplir a cabalidad el conocido axioma de Heráclito, no puede bañarse dos veces en el mismo río.
De esta suerte el suyo es un nuevo ejercicio creador (inédito al momento de escribir estas líneas) que la obliga, aunque se trate de una temática obsesiva, a ir recogiendo y repitiendo instantes, que van de la vivencia a la experiencia, pues, sin caer precisamente en lo anagramático es rotunda en la síntesis y en esa suma de instantes que rescata del entrañable pasado, con una memoria que no brota solamente de la conciencia sino sobre todo de la propia piel instintiva e intuitiva.
También vale destacar que los oficios del amor, y hasta de la cotidianidad de la mujer poseída por la materia y las circunstancias que pasa a ser poseedora en el momento de recordar, añorar y registrar poéticamente los hechos donde se imbrican la ternura y el deseo, la curiosidad y el miedo, el estar en medio de la vida y la muerte, no son los únicos componentes de toda esta estructura poética armados con signos y códigos tan personales.
Y es que mas bien, Siomara España hace uso de lo carnal y erótico, de lo común y extraordinario para, con ahorro de palabras y el uso de imágenes precisas, descubrir y proyectar la sustancia mágica de la pócima ya bebida de donde sucede que los terceros de este eterno “triángulo vital”, o sea, los usuarios de esta obra de grandes destellos líricos pasan a ser los beneficiarios de un mensaje con que la autora la emprende, además, contra el prejuicio, la pacatería y la prosaica.
La presentación del libro Alivio Demente será en el Palacio de Cristal, Urna Norte, en el contexto de la Expolibro 2008, el miércoles 9 de julio a las 19:00. El análisis de la obra estará a cargo de la Dra. Sonia Manzano, poeta y Subsecretaria de Cultura del Litoral y Galápagos y de la Dra. Katia Murrieta, Distinguida Notaria del Cantón Guayaquil.
Toda voz poética ha de tener, a más del público oyente o lector, un destinatario. Que puede ser uno sólo, en trance de intimista, o lo colectivo si se trata de un mensaje de contenido social:
En el primer caso el autor entra en su propio o íntimo confesionario para decir su secreto a grandes voces. No precisamente para descargarse de culpa ni para desgarrarse las vestiduras, sino para entablar un diálogo, algo así como un monologo coloquial, perdonando la paradoja, con el ser que ha concitado el amor o el deseo, o esa propia identidad que va pretérita y presente rescatando del olvido.
Desde su primera obra, CONCUPISCENCIA, que tuve la satisfacción de presentar en su lanzamiento Siomara España nos llega ahora con su segunda entrega “ALIVIO DEMENTE”, el fruto de una pasión no escrita efímeramente sobre al agua o la liviana arena, sino con el firme propósito de llegar a lo perpetuo a través de las páginas impresas.
Y no se trata, digamos, de esas “segundas partes que nunca fueron buenas”, sino de una legítima tentativa de reinventarse con nuevos recursos en la riesgosa función de la escritura.
En realidad la poeta, que ha de cumplir a cabalidad el conocido axioma de Heráclito, no puede bañarse dos veces en el mismo río.
De esta suerte el suyo es un nuevo ejercicio creador (inédito al momento de escribir estas líneas) que la obliga, aunque se trate de una temática obsesiva, a ir recogiendo y repitiendo instantes, que van de la vivencia a la experiencia, pues, sin caer precisamente en lo anagramático es rotunda en la síntesis y en esa suma de instantes que rescata del entrañable pasado, con una memoria que no brota solamente de la conciencia sino sobre todo de la propia piel instintiva e intuitiva.
También vale destacar que los oficios del amor, y hasta de la cotidianidad de la mujer poseída por la materia y las circunstancias que pasa a ser poseedora en el momento de recordar, añorar y registrar poéticamente los hechos donde se imbrican la ternura y el deseo, la curiosidad y el miedo, el estar en medio de la vida y la muerte, no son los únicos componentes de toda esta estructura poética armados con signos y códigos tan personales.
Y es que mas bien, Siomara España hace uso de lo carnal y erótico, de lo común y extraordinario para, con ahorro de palabras y el uso de imágenes precisas, descubrir y proyectar la sustancia mágica de la pócima ya bebida de donde sucede que los terceros de este eterno “triángulo vital”, o sea, los usuarios de esta obra de grandes destellos líricos pasan a ser los beneficiarios de un mensaje con que la autora la emprende, además, contra el prejuicio, la pacatería y la prosaica.
La presentación del libro Alivio Demente será en el Palacio de Cristal, Urna Norte, en el contexto de la Expolibro 2008, el miércoles 9 de julio a las 19:00. El análisis de la obra estará a cargo de la Dra. Sonia Manzano, poeta y Subsecretaria de Cultura del Litoral y Galápagos y de la Dra. Katia Murrieta, Distinguida Notaria del Cantón Guayaquil.
Comentarios
alguna vez leí algo y me pareció medio bacán
abrazos